Una pequeña modificación
en tus hábitos a conciencia, puede cambiar el futuro del planeta. Una canilla que gotea
pierde casi 1.900 litros de agua por mes, la suficiente para bañarnos unas 100
veces. Con este dato escalofriante... ¿Por dónde empezamos a ahorrar?
1. Coma un poco menos de carne, especialmente la carne de hamburguesa
típica la cual pudo haber gastado 630 litros agua para ser producida.
2.
El horario en el que riegas influye en el ahorro de agua. Si tienes jardín, o
plantas en la ventana o balcón, regalos por la tarde o noche para evitar que el
agua se evapore muy rápido debido al calor.
3.
En época de sequía no es necesario regar el pasto que se puso amarillo, porque
no está muerto, sólo inactivo. Al regresar las lluvias volverá su verdor.
4.
Cuando cortes el pasto, no lo hagas al ras. La altura conveniente es entre 5 y
8 cm. Así, las raíces se mantienen sanas y se retiene la humedad. No barras lo
cortado ni rastrilles las hojas secas. Ayudarán a conservar la humedad.
5.
Cuando te hospedes en un hotel, verás que te ofrecen la opción de no cambiar
tus sábanas cada noche, justamente para ahorrar agua. Opta por ello. Si te
hospedas en un lugar que aún no sigue esta regla, sugiérela.
6.
¿Abriste la llave y esperas a que salga el agua caliente? Que haya siempre un
balde cerca. Allí podrás recoger el agua fría que sale primero y luego usarla
para regar, lavar o limpiar.
7. Ejecutar el
lavavajillas y la lavadora sólo cuando estén llenos. Recuerde, el ahorro de
agua ahorra energía, y el ahorro de energía ahorra agua.
8.
Procura lavar tu auto con un solo balde, ya que así estarás ahorrando más de
300 litros de agua en cada lavada.
9. Recicle
plásticos, vidrio, metales y papel. O trate comprar productos reutilizables en
lugar de productos no retornables, ya que hay que utilizar agua para hacer casi
todo.
10. Cierre el grifo mientras se cepilla los dientes y al lavar los platos. Tomarse uno o dos minutos de su tiempo en la ducha para afeitarse.